Descubre la carboxiterapia, el mejor tratamiento para suavizar las estrías o la piel “de naranja”, así como para mejorar la flacidez, tanto a nivel facial como corporal. En este artículo trataremos de explicar en profundidad en qué consiste este tratamiento y cómo lo trabajamos en Institut Cimax.
¿Qué es la Carboxiterapia?
La Carboxiterapia es un procedimiento médico, no quirúrgico, que consiste en la inyección de gas Dióxido de Carbono (CO2) en el tejido subcutáneo, mediante una pequeña aguja. El dióxido de carbono es un gas natural incoloro e inodoro, muy soluble en sangre, que se produce de forma natural en nuestro organismo, lo que hace que esta sea una terapia muy segura.
El dióxido de carbono se infiltra por vía subcutánea, percutánea o intradérmica a través de una aguja muy fina y tras su aplicación se da un ligero masaje en la zona con el objetivo de facilitar la distribución del dióxido de carbono.
Una vez se ha inyectado, una parte del gas se adhiere a la grasa y el resto se dirige al torrente sanguíneo, provocando un incrementando del riego sanguíneo de la zona tratada. Cuando el CO2 entra en contacto con la hemoglobina, provoca la liberación de oxígeno a nivel local.
¿Cómo se aplica la carboxiterapia en Institut Cimax?
En Institut Cimax utilizamos la plataforma Carbtek Advanced, al contrario que algunas formas de aplicación con pistola, permite regular tanto la presión como la temperatura a la que se prefiere administrar el gas, pudiendo ajustar los parámetros para conseguir un mejor resultado y minimizar la molestia que puede ocasionar la técnica.
Los tratamientos de carboxiterapia constan de varias sesiones (en ocasiones mínimo de 8), separadas entre 3 días y 3 semanas, dependiendo del protocolo establecido para cada tratamiento, y puede requerir alguna sesión de mantenimiento. Se puede aplicar en cualquier época del año.
¿Para quién está indicada?
La carboxiterapia es eficaz en el tratamiento de cicatrices y en la mayoría de estrías, ya que estimula la regeneración cutánea mediante la reorganización del colágeno y la estimulación de la formación de colágeno nuevo.
Además, es una de las mejores terapias para combatir la celulitis y la flacidez. La eficacia del tratamiento radica en que actúa sobre uno de los factores causantes de la celulitis, como es la afectación de la microcirculación de la zona.
Gracias a la carboxiterapia se puede tratar:
- Estrías.
- Celulitis.
- Grasa localizada.
- Flacidez.
- Rejuvenecimiento.
- Marcas acné.
- Cicatrices.
- Caída o debilidad del cabello.
- Contracturas musculares.
- Cicatrización de úlceras.
- Ojeras.
¿Por qué funciona la carboxiterapia?
El gas CO2 estimula el flujo sanguíneo con diversas consecuencias:
- Aumento de la oxigenación del tejido.
- Aumento del metabolismo a nivel local.
- Estimulación de la formación de colágeno y elastina.
- Mejoría del drenaje linfático.
Carboxiterapia y la celulitis
La carboxiterapia es una buena alternativa a la liposucción para personas que no están dispuestas a pasar por una anestesia general y cirugía.
En primer lugar, la Carboxiterapia debilita las células de grasa debido al traumatismo que provoca la presión a la que entra el gas.
En segundo lugar, el CO2 dilata los vasos de la zona donde es inyectado. La reacción a la inyección de CO2 proporciona una mejor oxigenación de las capas de la piel, lo que provoca también un aumento de la lipolisis. Como resultado, el número de adipocitos (células de grasa) es menor y la piel se estira.
Además de reducir la celulitis y la grasa localizada, el CO2 mejora la elasticidad de la piel y promueve la producción de colágeno, tratando de esta forma la flacidez que podría quedar residual.
Carboxiterapia y las estrías
Las estrías son aquellas marcas, de color rojo o morado, que pueden aparecer en la piel por culpa de tres razones: la acumulación de grasa, la fibrosis y/o mala circulación. Con el tiempo, el color de las estrías va cogiendo un tono más blanquecino.
La carboxiterapia es uno de los mejores tratamientos para tratarlas, gracias a la aplicación del dióxido de carbono el tono de la piel se reestructura y estimula la producción de colágeno en la zona. Esta técnica ayuda también a prevenir la aparición de nuevas estrías y, a su vez, rejuvenece la piel.
El tratamiento de carboxiterapia se aplica en aquellas zonas donde se suele concentrar las estrías, como en las piernas, los brazos o el abdomen.
¿Cómo es el tratamiento de Carboxiterapia facial?
La carboxiterapia facial es también un tratamiento idóneo para estimular la producción de colágeno y elastina, lo cual mejorará visiblemente la firmeza de la piel. El tratamiento se aplica también a través de microinyecciones de dióxido de carbono de forma subcutánea, dilatando los vasos sanguíneos y provocando una oxigenación superior de la piel.
Las zonas donde se suele emplear este tratamiento son:
- Ojeras.
- Pómulos.
- Labio superior.
- Surcos nasogenianos.
- Mentón.
- Papada.
- Cuello.
- Escote.
Es un tratamiento no invasivo realizado en consulta y que permite la incorporación inmediata a la actividad diaria.
Gracias a la carboxiterapia facial se consigue:
- Reafirmar los tejidos y prevenir la flacidez.
- Minimizar las arrugas y líneas de expresión.
- Mejorar la apariencia de cicatrices y marcas de acné.
- Iluminar el rostro.
- Estimular la circulación, el colágeno y la elastina.
- Mejorar las ojeras que están muy marcadas.
Si estás interesado/a en este tipo de tratamiento, solicita información a nuestros profesionales. Te ofreceremos un tratamiento totalmente personalizado para conseguir los resultados deseados.
